Carayyyyy
No sé que decir de lo controversial que fué esta edad para mí. Creo que, la fusión que pueda hacer con mucha de las cosas con las que se mantuvieron los pedazos de mi vida, dentro de esta edad, es toda hazaña que pueda realizar, por que ni yo mismo me reconozco, con la a veces estúpida aptitud que me llegué a plantear en esos días de mi vida. Para ser fundamentales, confesaré abnegadamente que aquí encontré el "primer Amor", el primer follón de flácidas circunstancias, el primer golpe dado por la fortuna, el primer silencio otorgado, y las primerizas y degeneradas escenas en las que de plano si me volé la barda. Me sentía como Asia Argento en -Corazones Heridos-, o Nicolas Cage en -Adiós a las Vegas-, con pérdida del tiempo que había pasado, con muchos asuntos pendientes tirados al olvido. Era algo curioso, pero muy triste por lo que me desataría. Era de llegar tarde y muy noche a casa, era vivir de entre copas, y de entre personas con las que no logré escapar para ese año del todo. Me sentía mal, pero aún así disfrutaba la fiesta, disfrutaba, el poder -ser libre- y comparar mi hechos, con lo fictisio que era mi circunstancia, fué una edad durísima, la más dura de todas, con respecto a mi identidad con la gente, allí aunque estaba degenerado con mis actos, y mis tan desmadrugadas tardes, yo resurgía del polvo, era como un olvidado gangster que se quedó en la cama dormido, pensando que ni mi familia, ni la escuela, ni el trabajo que estuve a punto de perder, bastarían para hacerme ver que andaba muy mal con muchas de mis cosas, era una etapa dificil, y mi circunstancia no abogaba para poder pedir ayuda. Estaba en el hoyo de mi propio hecho, casi demolído, triturado, abandonado, denigrado, bailando cosas ridículas, y sintiendo la verguenza más grande de mis ayeres. Fué horrendo, apenas y recuerdo esos momentos claves, que apesar de ser momentos de horrendés, cayeron como marcas que allí están, contemplativas a desaparecer. la segunda mitad de año marco una pauta, yo llegaba tarde, me olvidaba de mi verdadero ser, y de mis intereses, pero creo que al final del tunel, siempre uno verá a Barcelona, con esa Canción de Tajabone que te haga pensar, y creo que así me sucedió a mí. Terminé con una extraña fascinación por Barcelona, y por esas pequeñas cosas que me harían recuparar parte del tiempo perdido. Diciembre marca el antes y el después, pero no algo definitivo. Fué allí cuando terminé con personas, y comencé con los humanos, veía con unos ojos muy distinto, todo lo que ese año fijé, pero en fín, nada era definitivo, aún había secuelas de esas pequeñas inicié con una película que me cambiaría la vida como lo es - Y tú que $%"@ piensas- y cerré el ciclo con -La Vida Sin Mí- terminar los 15 era algo más allá de eso. Necesitaba alejarme de mi pasado, y de esas cosas que me apabullían. Había entrado a la preparatoria, pero aún teníael pasado torturado de la secundaria, fué follón, pero en fin... nadie mejor que yo para ocultarlo. Terminó todo muy tranquilo, pero creo que fué ese Diciembre, el que me hizo parar el volante de mis tractores, en fin... creo que todo esto terminó bien, pero no desapareció, los 16 que vendrían harían cosas que me ayudarían a resolver y a vivir todo aquello que ahora se hace conocido.
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