Música: Blinded By The Lights - The Streets

El viejo ritmo que llevamos los adolescentes, siempre será un conflicto con la insercción de una nueva realidad en nuestras vidas, siempre será un motivo por el cual, la desesperación, puede llacer en la desesperanza, y el olvido de un bien en común, pero ante todo ello, muchas nuevas realidades que son temporales, pueden traer bajo la manga, una fuerte cantidad de emociones, que si bien no hacen mal, cae en un bien para nuestra vida. Siempre le eh tenido miedo a que las emociones me caigan de golpe, puesto que nunca tendré el valor para absoverlas en menos de cinco minutos. Ya planeada un par de nuevas emociones, que desde hace dos meses se vienen cocinando, eh pasado la semana más bizarra, surreal, diferente, y experimental que eh podido vivir hasta ahora. Un extrañe personaje que en el pasado solo tenía la representación de su alma y cuerpo, através de letras de una conversación virtual, se figuró y transformó en un ser de carne y hueso en la ya pasada noche de Sábado, que en casi punto de la media noche, suspiraba los anhelos de conocerme, un personaje llamado Roberto, inicio la semana que desnudaría el alma de un arturo que pocos han tenido oportunidad de conocer, allí sin muchos prehámbulos, comenzé esa transformación de realidades, de choques de ideas y de pensamientos, con otro humano que piensa y razona con esa idea de la vida humana en esta rara actualidad, yo nervioso, solo pensaba en la única fuente de seguridad disponible en ese momento, mi dios y mi caminar. La semana iniciada en ese sábado, comenzó a tambalearse por mi choque de horario de trabajo, pareció aún un capullo, puesto que mi rose de ideas aún era notable, en ningun momento paré de tener una vieja alerta que me decía lo tan atento que debía estar por todo lo que sucediese, le presenté a los hombres y mujeres de mi vida, a aquellos que me han ayudado a sobrevivir en este vagabundo y freak pueblo que tiene muchos aires de una escandalósa ciudad, en un primer día solo fué platica corrida, él, demasiado abierto con los temas de sexualidad, incluyó en mi esa vieja cultura que staba medio desaparecida para todo este ser humano, para la noche del domingo, yo parecía aún un pequeño niño, que estaba siendo transportado a una nueva familia, inclusive me provocó miedo el no saber ser yo mismo con este nuevo personaje que se apoderaba por una semana de mi rutina diaria. Caminar... Caminar..., fueron uno de los toures más típicos que su servidor pudo brindar, un lunes medio desolado, que solo me hacía reflejo de lo que a veces puede ser el viejo instinto de pueblo, un lunes de juegos, de sonrisas que por parte de mis amigos no parecieron sinceras, cigarros, y muchas pláticas sobre las dudas existenciales, las necesidades humanas, y el eterno desvenir de la vida, un lunes libre pero inseguro en las palabras, aún no podía contener mucho de mi ser con este cambio tan brusco. Para el martes, uno de mis más sinceros contactos, preparó una comida exótica, que solo alavaba la idea, de lo tán genial que puede ser, el ser humano con talento, y con una vida que a una corta edad puede convertirse una obra de arte, Roberto, allí maravillado con tal exquisita variedad de culturas, sabores, y gustos, comenzó a darse cuenta lo bizarro, y extraño que era mi pueblo en una comunidad en pequeños espacios, el día terminó semidesnudo en las palabras, yo comenzé a darme cuenta de que tenía a un chaval el cual quería ayudarme, pregunté lo que en esos instantes debía preguntar, reí lo que debí, pero aún del todo no me sentía agradablemente bien, andaba cegado por la luz, ese día sin menos no olvido, comenzaron los relatos de La ciudad de los cazadores tímidos, una selecta obra de el escritor Tom Spanbauer, que solo provocó mi inisiación directa con la lectura de novelas, que pronto iniciará, un martes que se fué con muchas risas, pláticas y cosas sinceras. El miércoles, después de la lluvia y de las sinceras peleas en casa, partimos hacia una zona arqueológica que yo desconocía del todo, parecía un desconocido en tierra conocida, mi viejo amigo isaías, que es un mesías de artes, cine, cultura, artes plásticas, dibujo y diseño (todo en uno), nos deleitó con su tan genial manera de explicarnos cada una de las zonas, un paseo por un pasado, que me hace feliz, aún siendo desconocido para mi conciencia, la tarde de vuelta regresó con más pláticas, me sentía cada véz más agradable al caminar acompañado, con charlas de cualquier índole, que solo iniciaban la basta confianza que comenzaba a invertir en la semana, después de llegar y medio dormirme llegamos a comer, un enorme pollo que ante los ojos de un vegetariano, contempló lo bestias que podemos llegar a ser frente a un buen trozo de comida, que saseaba nuestro estómago, en esos días, solo teníamos una o dos comidas, eramos unos forasteros que solo querían ahorrar dinero, después de esa comida seguimos caminando, buscando cables para ipod, mirando la ciudad-pueblo con tintes húmedos, yo escuchando a David Grey, y los tres con caminos desviados, que nos llevarían a la casa de el ya antes presentado José Luís, allí, en medio de pláticas demasiado pronfundas, sonrisas no del todo sinceras, y playlist de música inorbital, pasamos más de cuatro horas, que se hacían acompañar de la Cinta Princesas, misma que me hizo sacar ciertas sensación de llanto, y de identificación por parte de Roberto, en alguno de los personajes, una cruda realidad, que solo se asimila a los ojos que ven con viejas persepciónes, nuestro inolvidable pensamiento de la desigualdad, la noche tornó aún mejor con lo que se pretendía sería un recuerdo congelado en una fotografía, las horas pasaron, y hubo más charlas en ese viejo cuarto que antes de que esa semana comenzará, era el centro de mis ideas, ideales, y desvenencias que estaban contempladas en mi vieja pluma y papel, el martes se complementó con una fantástica sorpresa que tenía entremanos, mi hermana Editha con los tintes de indiferencia me sorprendió con una grata sorpresa, entre manos, tenía un enorme disco, que me hizo sentir demasiado bien, se trataba del ya idolatrado señor Arturo Jiménez, mismo que os ya eh mencionado, el disco nombrado Dialogos de Reciclaje, contiene nueve pistas que te transportan a una ambiente toalmente sublime, lleno de sonidos que se convierten en drama, poesía, risa, aventura y miedo, estaba demasiado feliz con el disco, además de las palabras que salieron de Rob, al momento que el mencionó, que estoy haciendo las cosas bien, que me estoy involucrando con gente que me dejará cosas buenas para la vida, y que tengo que tomar desciciones en cuanto al ambiente en el que me desenvuelvo, una noche fenomenal, que terminó con un buenas noches, y un buena suerte . El jueves, todos mis anhelos estaban concentrados en otra parte importante de mi vida, mi rancho, que apesar de que se desgasta con el tiempo, siempre será la fuente que me ponga en pié, un lugar que solo podía ser pisado por los rotos lazos de mis enlaces amistosos, un día que fué cansado, que estuvo lleno de accidentes, que contempló lo enorme que puede ser la naturaleza, que derramó sangre por la nariz, que hizo ver que en realidad soy buen guía turístico, que puso el estómgo flotando en el aire, fué un jueves para también insistir en lo que es imposible, en escuchar a tracy chapman, a travis, a Asia Sargento, a placebo, a alan jackson y a la infinidad de artistas que contemplaban la tarde, nadie s eimaginó que después de una sessión en un viejo videoclub, termináramos en un oscuro cuarto escuchando a Enya, acariciandole el pelo, y contemplando una sublime atmósfera, de miedos, inseguridad y desconfianza con el mundo, salí corriendo del lugar con lágrimas en los ojos, estaba siendo tragado por lo que usualmente divago como el problema de encontrar la más fiel y sincera felicidad de la vida, la noche no paró allí, que solo comenzaba a gonizar con las palabras de un tipo que conoce mi vida como mi palma, y con otro que pretende conocerla, a través de este corto tiempo de encuentro, después, yo lloré aún más, por mis inseguirdades, por mis debilidades, por mis roses de pensamiento con otro individuo, por infinidad de trabas, por derechos, por virtudes, por incomódidades que solo me perturbaban o aún me perturban, por todo, por todo lloré, temblaba ante un individuo que se convirtió en el primero que vé a un arturo demasiado desnudo del alma y del corazón, llorando y temblando con una seguridad tan profunda de dejar caer la mayor parte de las cosas ocultas en un tesoro, la noche aún no paró puesto que no dejé de pensar en las circunstacias, tenía los piés más puestos en la tierra, y él corazón más colocado en la estrellas, ni si quiera podía pensar, estaba cegado por la maldad, y la universalidad de las ideas, me dormí y creo que morí para volver a nacer ese mismo viernes sánto. El viernes sánto por la mañana, necesitaba oir algo de gospel, y reflexionar con la mirada de un reciente sol, todo lo de la noche anterior, me alisté y me fuí al viacrusis, que me hizo acompañar a alguién, mi honesta postura religiosa, fué cansado, e inconcluso, no sentí una totalidad de entrega, pero si de amor, ví a demasiada gente, le confirmé a Roberto, lo mágico y raro que era el pueblo, y con frases como "Todo esto me da miedo..." pasamos esa mañana que solo apetecía a más comida, y como el dinero aún era escaso para toda circustancia, tratamos de alimentarnos de lo barato que podía producir la ciudad, así que nos fuimos en plan de comer aún más tacos, mi madre me ah dejado muy aparte esa idea, de No comer carne los viernes sántos, y por ello no dudé en comer algo de este común plato, ese día fué un poco aburrido, yo tenía mucho sueño, y solo veíamos la gente pasar, recordando ese martes en donde nos acribillaron los "colegas" con la rara aptitud de querer siempre aplastar a la gente, el viernes, hubo pescado en casa, además de una estupida pelicula, que sentía era de arte, y que solo terminó por ser otra churrera que produce el cine Estadounidense, ese día fuimos a ver a Isaias (Blog), fué uno de los más geniales personajes de esta aventura, que de igual manera conoció una pisca de mi vida, nos acompañó al super local de Walt Mart deformado del nombre, y nos brindó infinidad de momentos agradables, para el viernes nos fuimos a descanzar plenamente, sin antes no repasar una lectura de La Ciudad de los Cazadores Tímidos, ese día finalizó así. El sábado me desperté medio grotezco, pensando si iría o nó a trabajar, haciendo llamadas incoherentes, viendo Casi Perfectos que se convierte en mi nueva serie favorita, y haciendo planes en dos, ese día Roberto me ah acompañado al que se estaba convirtiendo en mi frío trabajo, allí a lado de mí por casi todo el día, en esos momentos comenzaba a sentir un poco la complicidad de las cosas, parecía alguién raro que solo quería dar buenos momentos, pero por mi inseguridad demostraba lo contrario, después de esa larga tarde de videos en el youtube, de páginas web, y de otros chiringuitos abiertos, nos fuimos a lo que sería la fiesta de despedida, un cuarto lleno de gente, que entre ella sacundian los rostros desconocidos, y semibriagos, mucho humo y licor que se apoderó de las mentes, de la gente que estaba allí, ingratitud, y también deshorandez para afrontar las cosas, fluyeron en ese lugar, solo podía escuchar Just To Be Your Man de Josh Turner, que se repetía y repetía, después ya termina la noche que concluyó con un canaya Robo de dinero, estuvimos, escuchando las viejas barras azules y estrellas, que se acompañaban con el susurro de Sufjan Stevens, el sábado concluyó con peleas, que solo fueron de un mal desagrado, llegué a casa medio enojado, y inválido para seguir despierto, esa madrugada de domingo fué la último antes de que él partiera, para el domingo, yo me paré temprano, vimos Casi Perfectos, y los últimos momentos de la fantástica In&Out, que se convirtió en una cinta clave, ants de que me fuera a trabajar, ese día entraba la Una, y yo estaba que me meaba por salir ya!, comimos a lo típico y yo partí a lo atípico, haciendo la representación de el hombre que va a buscar pan y la mujer que se queda con los niños, llegué a mi trabajo y no hubo mucha novedad, hasta que de repente, el llegó, vestido muy de etiquéta y con tintes elegantes, acompañó toda mi tarde, hasta salir, me sentí ese día y un día antes, como si hubiera encontrado "el amor" a lo muy estilo "Princesas", en donde citan una frase muy genial, en la que exclaman que "El amor es, el que te vallan a esperar a la puerta de tu trabajo...", para después, de eso, fuimos a casa de Isaías, para despedirse, y dar un pequeño recuento de ese libro que se convertía en clave, sonrisas, y recuerdos de dos noches anteriores con té's, que por cierto, días anteriores obtuve un fenomenal regalo, al recibir por manos de Isaías, el fabuloso Takk... de Sigur Rós, la despedida ocurrió, y yo me anciaba de hambre, fué una velada genial, el comer ese día y un día anterior, y un viernes antes de ese día anterior, una enorme cantidad de hamburguesas que me destapaban los sentidos, pasamos un momento fenomenal, en donde nos dimos cuenta que en una semana se aceleró la confianza, enormes risas sinceras, y alogios a manos que hacían la comida, esa sessión terminó con un bombo y un viejo platíllo, de 74 pesos. Para después, fuimos al videoclub a rentar una pelí, el me regaló Northfork en versión original, misma que tenían en venta en ese videoclub, anduvimos buscando The Hours, para poder cerrar con broche de oro la semana, pero nuestros intentos en ese y otro videoclub, solo nos hicieron rentar Devil's Prada, que en final no se rentó por problemas de control, a todo ello, la sessión finalizó con El Jardinero Fiél, que fué la cinta que cerraría la sessión de la semana, nos dirigimos a la casa de josé luís, para ver si tenía un disco que le pedí me quemara, mismo que le hiba a regalar a roberto, el destino nos hizo topar en una de las tantas esquinas de la ciudad, y con la cara de desarreglo, me incumplió con tan petición, Roberto se despidió de el, y de Alejandro mismo que le acompañaba a dejar una peli de Nick Cage, nos fuimos caminando Rob y yo hasta la casa, bajo la lluvia, y al tono muy de los 50's, hasta llegar a casa, por un momento sentí una sensación de necesidad de afecto, me sentí muy extraño con todo, hasta con la fotografía que me había tomado momentos antes de entrar a mi casa, cuando lo hicimos, vimos el Jardinero fiél, que se convirtió en algo demasiado enredado para un momento de plática y chuncheo, después intentamos ver Northfork pero la situación no se prestaba para tanto, así que decidimos pasar las últimas horas en el cuarto escuchando música, desde Damien Rice hasta Vnv Natión, escribiendo y recordando lo genial de la semana, comiendo tamales, riendo, y con sentimientos encontrados, me dormí un poco hasta que las cinco de la mañana se llegaran, unos días antes había escrito algo para el, y lo tenía en la bolsa, llamamos un taxi, y nos marchamos a la terminal, yo me sentí como en Lost In Translatión por segunda ocasión, pero ahora era yo el que se quedaba y no el que se hiba, entregando una carta, y diciendo adios, que por poco se convertiría en un accidente, puesto que me resvalé de la banqueta antes de nombrar un hasta pronto!, me regresé a casa y comenzé a reflexionar de todo, tenía sueño, y estaba cansado, después de esta semana solo quería cerrar un poco los ojos y ver con nuevas sensaciónes la ciudad.

Hoy me eh despertado, y me eh venido al centro, eh percatado que me siento muy raro el caminar ahora en plan solo, me sentí rarísimo en no tener a alguién quién ver en mi espalda, en quién no poderle hablar, me sentí muy extraño con todo eso, e inclusive comenzé a extrañar a ese pequeño amigo tapatío, que me hizo cambiar mi rutina en una semana totalmente extraña en los más vagabundos sentidos. Hubo risas, lagrimas, enojos, disgustos, enojos, falsedades, sinceridades, y golpes, en una semana que fué especial en mi vida, que me regaló música, cine, y buenos momentos, y que nunca se borrará de mi vida.

os dejo con esta canción que se convirtió en algo muy significativo para ambos, y que en vez de marriane el nombre de arturo sienta de lo más mejor.



Gracias Roberto!, ahora formas parte de mi historia.